Hábitos sostenibles, ¿Cómo ser más sostenible en casa?

martes, 20 septiembre, 2022

La palabra sostenibilidad hace referencia a la capacidad de cubrir las necesidades del presente sin comprometer las necesidades de las futuras generaciones. Si quieres empezar a modificar tus hábitos para ser más sostenible, un buen punto de partida puede ser tu propia casa. 

Todas nuestras acciones tienen un impacto en el mundo que nos rodea, de nosotros depende que este impacto sea positivo o negativo. Para ayudarte a respetar el medio ambiente y que este efecto sea lo más beneficioso posible, te traemos una serie de consejos y de hábitos sostenibles en casa. ¡Toma nota!

 

Ahorrar electricidad

 

Existen una serie de hábitos sostenibles que te ayudarán a hacer un consumo de energía mucho más responsable. Algunos de ellos son:

  • Compra electrodomésticos con certificación A+ o superior, ya que consumen menos energía. Procura, además, que se adapten a tus necesidades (por ejemplo, si vives solo no te hará falta un frigorífico demasiado grande).
  • Utiliza bombillas de bajo consumo y apaga siempre las luces de las habitaciones en las que no estés. También puedes aprovechar la luz natural abriendo persianas y cortinas para evitar encender bombillas innecesariamente.
  • Aísla bien tu casa, poniendo especial atención en las ventanas, ya que es uno de los lugares donde más temperatura se pierde. De esta forma te protegerás mejor tanto del frío como del calor y no necesitarás recurrir demasiado a la calefacción.
  • Evita siempre la opción “standby” de los aparatos electrónicos. Aunque parezca que no, el modo reposo también consume electricidad. Un truco que te puede ayudar es instalar regletas con botón que puedes apagar cuando no la utilices.

 

Ahorrar agua

 

Vivir en una zona de abundantes precipitaciones no te libra de evitar malgastar agua. Se trata de un hábito de vida sostenible que te agradecerá tanto el medio ambiente como tu bolsillo. Hay muchos pequeños gestos que te pueden ayudar a lograrlo:

  • Dúchate en lugar de bañarte, ya que hay una gran diferencia de consumo. Además, intenta que la ducha sea lo más corta posible, cada minuto con el grifo abierto se consumen muchos litros de agua.
  • Utiliza la lavadora y el lavavajillas siempre llenos.
  • Cierra los grifos mientras te enjabonas, te cepillas los dientes, te afeitas… 
  • Ten cuidado con las fugas de agua de cualquier tipo en grifos, water y ducha.
  • No utilices el retrete como cubo de basura. Además de gastar agua, estás vertiendo productos contaminantes. Para ello te recomendamos poner un pequeño cubo de basura en el baño.
  • Riega de noche ya que la tierra retendrá mejor el agua al haber una temperatura menor. 

 

Reciclar en casa

 

La regla de las tres R es un mantra para cualquier persona que quiera llevar una vida más sostenible. Esta consiste en reducir el volumen de residuos, reutilizar los envases y reciclar todo aquello que no se pueda reutilizar. Para seguirla te recomendamos:

  • Evitar el uso de plástico. Compra alimentos a granel, utiliza el vidrio como opción al envasado o acuérdate de llevar contigo una bolsa de tela siempre que vayas a comprar. Son pequeños hábitos que te ayudarán a reducir los plásticos en casa.
  • Aprovecha al máximo el papel. Imprime a dos caras, utiliza papel reciclado, aprovecha los papeles que tengas por casa…
  • Emplea cubos de basura para reciclar en casa. De esta forma podrás separar los plásticos, papeles, vidrio o residuos orgánicos y reciclar desde tu casa.
  • Utiliza los puntos limpios. Lleva pilas, electrodomésticos, aceites, etc.

 

Cambiar tu alimentación

 

La forma en la que nos alimentamos también influye mucho en nuestros hábitos sostenibles. Algunos consejos para mejorarla son:

  • Controlar el gasto en comida. Para ello realiza un menú semanal y, a partir de él, una lista de la compra para comprar solamente lo necesario.
  • Controla las cantidades cuando cocines. En caso de que sobre, recuerda que siempre puedes congelarlo para otro día.
  • Practica la cocina de aprovechamiento para evitar desperdiciar comida. 
  • Si puedes, monta un pequeño huerto en tu jardín, terraza o balcón. En caso de que no dispongas de espacio suficiente para hacerlo, siempre puedes recurrir a alquilar un huerto urbano. Cultiva plantas que sepas que vas a consumir habitualmente, como hierbas aromáticas u hortalizas. Te estarás ahorrando unos euros en la cesta de la compra y contribuyendo al consumo de productos kilómetro 0.

 

Consumir de forma responsable

 

El consumo responsable es una actitud y una forma de vivir que implica hacer un consumo consciente y crítico. Esto se demuestra tanto a la hora de comprar un producto como en el uso eficiente de los recursos de nuestro hogar. Para llevar a cabo un consumo responsable deberías:

  • Consumir solamente lo que necesites.
  • Comprar en tiendas con productos de comercio justo o ecológico.
  • Ser crítico, infórmate de lo que supone consumir los productos que utilizas habitualmente.
  • No hagas caso a las ofertas ni a la cultura del consumismo y del usar y tirar.

 

Santiago de Compostela apuesta por la sostenibilidad

 

Como ya te hemos contado en posts anteriores, el Ayuntamiento de Santiago de Compostela está apostando por un nuevo modelo de ciudad, el de las smart cities. Un tipo de ciudad capaz de combinar el cuidado del medio ambiente y el desarrollo sostenible con el crecimiento e innovación.

Desde Smartiago también estamos volcados con la sostenibilidad de nuestra ciudad y, con nuestro proyecto,  nos comprometemos a llevar a cabo una gestión sostenible de los residuos sólidos urbanos. Porque con los pequeños gestos de todos podemos ayudar a nuestro planeta.

 

COFINANCIACIÓN FEDER

El proyecto Smartiago se desarrolla en virtud a un convenio de colaboración de la Línea FID (Fomento de la Innovación desde la Demanda) entre el Ministerio de Ciencia e Innovación y el Concello de Santiago de Compostela y está cofinanciado en un 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España 2014-2020. También está cofinanciado por la Axencia Galega de Innovación (GAIN) en un 10%.